INSPECCIÓN NACIONAL DE HISTORIA
ORIENTACIONES PARA LA EVALUACIÓN SEMESTRAL EN 2º y 3º DE EMS 2025 (1)
ORIENTACIONES PARA LA EVALUACIÓN SEMESTRAL EN 2º y 3º DE EMS 2025 (1)
Al aproximarnos a una instancia de evaluación pautada por normativa, parece pertinente recordar, al inicio, que las evaluaciones especiales constituyen instancias para la reflexión en torno a las prácticas sobre la enseñanza de la Historia y sobre la concepción que los docentes tienen en referencia a estas. Las evaluaciones son también oportunidades para poner en diálogo las decisiones adoptadas respecto a: los propósitos del curso explicitados en el plan anual, el diagnóstico inicial, las metodologías educativas y los recursos didácticos empleados para el logro de aprendizajes significativos, entre otras.
Asimismo, es relevante recordar que para 1° de EMS está prevista una única evaluación semestral en julio. Para la misma, la Inspección de Historia realizó, en 2024, sugerencias a las que se hará referencia posteriormente. En 2° y 3° de EMS en cambio, las autoridades anteriores determinaron la realización de dos evaluaciones semestrales: la primera en la 2ª quincena de julio y la segunda en la 1ª quincena de noviembre.
En virtud de la implementación de la TCI en toda la EMS, de lo establecido en el REEMS (2) así como en las disposiciones específicas complementarias (3) resueltas por la DGES, esta Inspección, en atención a lo dispuesto, propone a los profesores de Historia, las siguientes consideraciones, como parte del acompañamiento que le es inherente.
Estas son:
• La pertinencia de retomar la lectura del documento elaborado por la Inspección de Historia en junio de 2024 con Orientaciones para la Evaluación semestral de 1° EMS (4).
• Otra relectura que planteamos como especialmente oportuna en este momento del año, es el apartado Orientaciones para la evaluación presente en todas las propuestas programáticas oficiales.
• Considerar la posibilidad de que las decisiones en torno al tipo de propuestas de evaluación que se estime pertinente proponer esté en consonancia con la forma y las actividades de trabajo con que los estudiantes se han encontrado a lo largo del desarrollo del curso de Historia, para . Esta consideración aplica
también para las instancias de acreditación.
• Tomar en cuenta que estas pruebas calendarizadas recogen sólo parte de la evidencia acerca del proceso de aprendizaje alcanzado por los estudiantes. La evaluación del semestre seguramente incluya otros recorridos, además de la prueba en sí misma. Todas ellas, en conjunto, constituyen instancias que aportan elementos para una evaluación más asertiva de los estudiantes.
• Se vuelve a sugerir la posibilidad, si el docente así lo considera, de no generar algo específicamente nuevo y trabajar con diferentes tareas potentes y significativas del semestre. Estas, seleccionadas criteriosamente por el profesor en diálogo con sus propósitos de enseñanza, pueden constituir una instancia propicia para poner en práctica la retroalimentación formativa, brindando a los estudiantes el espacio y el tiempo para aprender desde las oportunidades de mejora que le brindan sus propios desempeños.
• Otra alternativa posible podría ser el trabajar en clave de transversalidades, si el docente planificó incluyéndolas en su abordaje. Particularmente, algunos de los programas oficiales poseen Módulos opcionales que pudieron ser trabajados longitudinalmente al curso. Estos elementos vertebradores, que promuevan la puesta en diálogo de momentos diversos del curso partiendo de los contenidos, habilitan también el pensar históricamente, así como la conciencia y la empatía histórica, entre tantos otros rasgos disciplinares.
• La pertinencia de retomar la lectura del documento elaborado por la Inspección de Historia en junio de 2024 con Orientaciones para la Evaluación semestral de 1° EMS (4).
• Otra relectura que planteamos como especialmente oportuna en este momento del año, es el apartado Orientaciones para la evaluación presente en todas las propuestas programáticas oficiales.
• Considerar la posibilidad de que las decisiones en torno al tipo de propuestas de evaluación que se estime pertinente proponer esté en consonancia con la forma y las actividades de trabajo con que los estudiantes se han encontrado a lo largo del desarrollo del curso de Historia, para . Esta consideración aplica
también para las instancias de acreditación.
• Tomar en cuenta que estas pruebas calendarizadas recogen sólo parte de la evidencia acerca del proceso de aprendizaje alcanzado por los estudiantes. La evaluación del semestre seguramente incluya otros recorridos, además de la prueba en sí misma. Todas ellas, en conjunto, constituyen instancias que aportan elementos para una evaluación más asertiva de los estudiantes.
• Se vuelve a sugerir la posibilidad, si el docente así lo considera, de no generar algo específicamente nuevo y trabajar con diferentes tareas potentes y significativas del semestre. Estas, seleccionadas criteriosamente por el profesor en diálogo con sus propósitos de enseñanza, pueden constituir una instancia propicia para poner en práctica la retroalimentación formativa, brindando a los estudiantes el espacio y el tiempo para aprender desde las oportunidades de mejora que le brindan sus propios desempeños.
• Otra alternativa posible podría ser el trabajar en clave de transversalidades, si el docente planificó incluyéndolas en su abordaje. Particularmente, algunos de los programas oficiales poseen Módulos opcionales que pudieron ser trabajados longitudinalmente al curso. Estos elementos vertebradores, que promuevan la puesta en diálogo de momentos diversos del curso partiendo de los contenidos, habilitan también el pensar históricamente, así como la conciencia y la empatía histórica, entre tantos otros rasgos disciplinares.
Lo anterior dialoga puntualmente con los avances de la tecnología y el fluido manejo que los adolescentes tienen de la IA. Debido a esto, actividades que se centren únicamente en la recolección de información, en el recorrido lineal, entre otras, puede que no den cuenta de una apropiación cabal, profunda y significativa, de los recorridos del curso.
• Al mismo tiempo, el trabajo conjunto podría ser una estrategia posible, si los grupos lo han hecho de esta forma, están preparados para ello y si el docente considera que es un formato que dialoga con sus propósitos a alcanzar. Si la propuesta colectiva es una posibilidad la misma podría ser interdisciplinar, multidisciplinar; pero también intradisciplinar, considerando posibles proyectos y planteos de la Sala de Historia de los distintos Liceos a nivel país.
• Las evaluaciones especiales pueden promover consideraciones variadas, entre otras lo académico en general y lo inherente a la apropiación de rasgos del saber histórico, todo lo que se sustenta en lo conceptual. Es propio del trabajo profesional docente tomar esas decisiones en diálogo con la realidad situada de las aulas y el perfil de cada grupo considerando qué puede sostener cada uno.
• Se recuerda la relevancia de considerar la heterogeneidad ampliada del aula y lo desafiante que resulta la diversidad que habita los salones de clase. Se introduce, como una alternativa posible, el generar los espacios para que los estudiantes propongan modalidades diversas de presentación, las cuales serán habilitadas o no por el profesor, según su criterio.
• Al mismo tiempo se reitera, como en múltiples ocasiones anteriores, que una evaluación será verdaderamente una herramienta de aprendizaje significativo, si los adolescentes comprenden exactamente qué se espera de ellos y cómo su trabajo será valorado. Por ello explicitar los criterios y modalidades a manejar para evaluar los recorridos, es como siempre relevante, potencializado por el nivel, la edad y la trayectoria de los estudiantes.
• Como todo docente maneja, el evidenciar la propuesta y los diversos grados de apropiación de la misma, asegura la trayectoria de los estudiantes y refleja el diseño singularizado, generado por todo profesional de la enseñanza de la Historia. Si el formato de lo propuesto no es factible de ser archivado, es relevante generar una relatoría que oficie de memoria del sentido de lo propuesto, la consigna, la(s) modalidad(es) de presentación y los grados de apropiación de los estudiantes, lo que se presentará, para su guardado, en la institución de referencia.
• Al mismo tiempo, el trabajo conjunto podría ser una estrategia posible, si los grupos lo han hecho de esta forma, están preparados para ello y si el docente considera que es un formato que dialoga con sus propósitos a alcanzar. Si la propuesta colectiva es una posibilidad la misma podría ser interdisciplinar, multidisciplinar; pero también intradisciplinar, considerando posibles proyectos y planteos de la Sala de Historia de los distintos Liceos a nivel país.
• Las evaluaciones especiales pueden promover consideraciones variadas, entre otras lo académico en general y lo inherente a la apropiación de rasgos del saber histórico, todo lo que se sustenta en lo conceptual. Es propio del trabajo profesional docente tomar esas decisiones en diálogo con la realidad situada de las aulas y el perfil de cada grupo considerando qué puede sostener cada uno.
• Se recuerda la relevancia de considerar la heterogeneidad ampliada del aula y lo desafiante que resulta la diversidad que habita los salones de clase. Se introduce, como una alternativa posible, el generar los espacios para que los estudiantes propongan modalidades diversas de presentación, las cuales serán habilitadas o no por el profesor, según su criterio.
• Al mismo tiempo se reitera, como en múltiples ocasiones anteriores, que una evaluación será verdaderamente una herramienta de aprendizaje significativo, si los adolescentes comprenden exactamente qué se espera de ellos y cómo su trabajo será valorado. Por ello explicitar los criterios y modalidades a manejar para evaluar los recorridos, es como siempre relevante, potencializado por el nivel, la edad y la trayectoria de los estudiantes.
• Como todo docente maneja, el evidenciar la propuesta y los diversos grados de apropiación de la misma, asegura la trayectoria de los estudiantes y refleja el diseño singularizado, generado por todo profesional de la enseñanza de la Historia. Si el formato de lo propuesto no es factible de ser archivado, es relevante generar una relatoría que oficie de memoria del sentido de lo propuesto, la consigna, la(s) modalidad(es) de presentación y los grados de apropiación de los estudiantes, lo que se presentará, para su guardado, en la institución de referencia.
En otro orden, a partir de la implementación del nuevo plan, existen otras situaciones que han de ser consideradas; a manera de ejemplo, la posibilidad de que estudiantes que no habitaron las aulas de Historia en el curso inmediato anterior conformen algunos de los grupos a cargo, así como quienes que tengan pendiente de aprobación la asignatura.
En relación a estas posibilidades, a las anteriores sugerencias se le suma:
• Considerar la pertinencia de elaborar un plan de acción para acompañar a estos estudiantes, a partir de una selección estratégica de nudos temáticos/conceptuales que transversalicen el marco temporal de ambos cursos.
• Todo lo anterior, puesto en diálogo con las habilidades que el docente estime imprescindibles, pueden contribuir al desarrollo del pensamiento histórico, espíritu crítico, y promoción de autonomía.
El diseño de un acompañamiento con estas características tiene como propósitos: promover habilidades inherentes a un aprendiente de la Historia, profundizar en una propuesta de trabajo problematizadora y maximizar el tiempo pedagógico disponible, procurando evitar la sobrecarga de exigencias, para estudiantes y docentes, con foco en lo formal.
Desde esta mirada, la evaluación semestral puede constituir una instancia más de este proceso de acompañamiento.
Sólo nos resta agregar que la Inspección de Historia queda a disposición de los colectivos docentes en los diversos territorios que acompañamos, a fin abordar planteos particulares que los colegas puedan considerar pertinentes.
Inspección Nacional de Historia
18/06/25
18/06/25
1- Aunque se utilizó el género masculino en la redacción por
convención, se reconocen las diversas manifestaciones de identidad en el lenguaje.
2-
https://transformacioneducativa.anep.edu.uy/sites/default/ les/images/componentes/Curricular/documentos/REEMS%202024%2030_11.pdf
3-
En Capítulo V, folio N.º 10: https://www.dges.edu.uy/sites/default/ les/2025-03/0001237.pdf
4-
https://test2023.dges.edu.uy/sites/default/ les/2024-06/Pautas%20semestrales/
HISTORIA%20RECOMENDACIONES%20JUNIO%202024.pdf , y en https://www.dges.edu.uy/sites/default/ les/2024-06/Pautas%20semestrales/HISTORIA%20RECOMENDACIONES%20JUNIO%202024.pdf
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